Mio

Esa viscosidad que esconde tu boca, que hace que apenas puedas moverla. Esos estáticos ojos rojos, que ya no intimidan a nadie. Tu perdida virilidad, repele todo género que desees poseer.

Aun así, te encuentro en ese cofre cristalino, como mi más preciado tesoro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario