Manía

Me perteneces, quería protegerte
Sentirme parte de tu vida vacía,
Sentir que el viento tocaba
las sensibles cuerdas de la felicidad....
¡Pero no! tú dejaste un hondo pesar,
Y quitaste mi seguridad,
Tengo que pensar lo que debo hacer
quitarte el corazón o morir con él.
No puedo dejarte ser...
Debo hacerte mi prisionero
que dependas solo de mí...
de mi agrietado corazón viejo y sangrante,
Quitarte las mieles que otras te pueden dar,
Meterme en tus sueños, en tus ojos y ser yo quien los guie,
Quien te torture por la eternidad.
Tarde he comprendido
Que mi fin sobre ti es condenarte
A una vida llena de sufrimiento
Por el amor que te profeso,
Oh! cuanto me arrepiento,
De amarte tanto,
Y ser tu verdugo,
Quien te da nada, solo amor
Amor...amor leal,
Sin mentiras, sin fingimientos,

Un amor casi muerto,
que nada hace, mio y pasional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario